
En 1980 Padrón decide incorporar el humor negro al animado (algo que había hecho ya en historietas) y comienza una serie conocida como Filminutos: vampiros, duendes, verdugos y toda suerte de personajes enrolados en absurdas y risibles situaciones, siempre de final hilarante e inesperado

El éxito de Padrón permite que se realice esta coprodución en la que se mezcla armónicamente absurdo y realidad, cine de horror, suspense, y de gángsters, comedia musical y de enredos.


Se rumorea que Juan Padrón esta actualmente trabajando en una especie de remake de Vampiros en La Habana.
No hay comentarios:
Publicar un comentario